en que los ojos buscan en los ojos un vuelo de gaviotas,
algo que es suelo y señuelo, una consagración y un laberinto de murciélagos,
lo que en la oscuridad surgía como un planer tanteando,
una piel que se enfriaba y descendia, un ritmo roto,
se vuelve convivencia, santo y seña, arranque
del viento que se estrella contra la vela blanca,
el grito del vigía nos exalta,
corremos juntos hasta que la cresta
de la hola cenital nos arrebata
en una interminable hola de espumas,
y recomienzan los naufragios, la lenta natación hacia las playas,
el sueño boca abajo entre medusas muertas y cristales de sal donde arde el mundo."
Julio Cortazar, "Ultimo Round", 1969.
Nenhum comentário:
Postar um comentário